El hígado es un órgano esencial para la energía y la salud humana. Ayuda a digerir los alimentos, liberar sustancias tóxicas y absorber los nutrientes vitales que el cuerpo necesita para sobrevivir, es por esto que es tan importante su correcto funcionamiento. Entonces, ¿cómo saber si mi hígado está bien o dañado? presta atención porque a continuación te explicamos todo lo que necesitas saber.
Segrega productos químicos porque produce bilis, una sustancia necesaria para digerir las grasas. Regula el metabolismo, pero también limpia y purifica el torrente sanguíneo.
Además se encarga de:
Este órgano realiza muchas funciones de vital importancia en el cuerpo, y cuando no está sano, avisa mediante varios signos externos. Si el hígado no está bien, las toxinas se acumularán dentro del cuerpo y esto afectará su apariencia. Los primeros síntomas de problemas hepáticos no deben ser ignorados y se debe buscar ayuda médica para asegurar un tratamiento adecuado. A continuación te detallamos cómo saber si el hígado está bien o dañado:
Signos visuales
Signos digestivos
Exámenes de sangre
En primer lugar, se mide el nivel de colesterol en la sangre, pues el hígado está muy involucrado en la producción de este, y ayuda a deshacerse de los excesos. Si se obtiene una lectura de colesterol malo en el análisis, deben hacerse algunos cambios en la dieta.
Desequilibrios de azúcar en la sangre
Si el médico sospecha que tienes un desequilibrio de azúcar en la sangre, evaluará tu nivel de glucosa en ayunas. Esto prueba la cantidad de glucosa que queda en el torrente sanguíneo de la noche anterior, ya que el análisis de sangre se realiza antes de comer o beber algo por la mañana. El hígado desempeña un papel importante en la conversión del exceso de glucosa en glucógeno, por lo que puede no estar haciendo esto de manera eficiente, o está siendo superado con una dieta alta en carbohidratos (pan, pasta, dulces, galletas, papas fritas, bebidas gaseosas, alcohol).
Pruebas específicas de enzimas hepáticas
Existen muchas pruebas hepáticas que su médico puede realizar. Sin embargo, las más comunes son:
Muchas personas no se preocupan por la salud del hígado, pues sólo asocian el alcohol con la disfunción hepática, y creen que si no beben mucho alcohol, no debería haber nada malo en su hígado. Sin embargo, la vida moderna, los productos químicos, los alimentos procesados y la medicación, hacen que el hígado esté bajo constante estrés.
Es por esto que se recomienda acudir al médico y aclarar todas las dudas e inquietudes que presenta al respecto, él sabrá cómo actuar, y las pruebas y exámenes médicos que debe realizar para descartar cualquier enfermedad, ya que algunas personas pueden nacer con problemas hepáticos, mientras que otras pueden dañar su hígado al estar expuestos a químicos dañinos, al alcoholismo o los efectos secundarios de un virus.